Nuestra historia

De nuestra familia a la suya

Me alegra mucho que hayas encontrado nuestra empresa y de que estés interesado en saber más sobre Smile Guard!

Smile Guard comenzó como una tarea escolar para crear un producto que pudiera utilizarse durante la pandemia de COVID-19. Inmediatamente, pensé en los retos que está experimentando la comunidad con problemas de audición sin la capacidad de leer los labios y ver las expresiones faciales a través del uso de una mascarilla obstructiva. Como respuesta, y con la ayuda de mis profesores, creé una mascarilla casera con una ventana transparente para lograr una visión sin obstáculos de la boca de la persona.

La inspiración de este producto viene de mi propia vida. Tengo 14 años y nací con una pérdida auditiva profunda unilateral. Como resultado, sé personalmente que la comunidad con problemas de audición depende en gran medida de la lectura de los labios y de ver las expresiones faciales para comunicarse con los demás. Aunque es innegable que necesitamos mascarillas para mantenernos a salvo durante la pandemia, un desafortunado efecto secundario es que se ha vuelto mucho más difícil para ésta comunidad con dificultades auditivas comunicarse fácilmente con los demás.

Para ayudar a solucionar este problema en medio de los desafíos de la pandemia, nació Smile Guard. Nuestro objetivo era encontrar una mascarilla, similar al prototipo que hice en casa, que garantizara la protección de las personas, pero que al mismo tiempo les permitiera leer los labios y las expresiones faciales. Mi familia y yo empezamos a buscar en el mercado y encontramos la mascarilla FaceView Mask™, de Face View, que cuenta con certificación KN95 y con pruebas en curso para las normas ASTM Clase I - III y para la aprobación de la FDA, lo cual permitirá utilizar esta mascarilla en un entorno clínico, y con la ventaja añadida de una ventana transparente, con un tratamiento para que no se empañe, para así mejorar la comunicación. Esta mascarilla cuenta con el amplio apoyo de intérpretes de idiomas, así como de médicos, enfermeras, dentistas, higienistas, ortodoncistas y otros profesionales sanitarios que buscan una comunicación más clara y una protección excepcional.

Por último, quiero marcar la diferencia y apoyar a mi comunidad y a las personas con problemas de audición de mi país y del mundo. Para ello, tenemos previsto donar mascarillas a los profesionales de la salud y a los educadores de la comunidad que más las necesitan y estamos muy contentos de habernos aliado también con la Starkey Hearing Foundation cuya misión es dar el regalo de la audición a personas necesitadas en los Estados Unidos y en todo el mundo. Por eso, por cada mascarilla que se venda en Smile Guard, donaremos un porcentaje a la fundación, así como el 100% de todas las donaciones adicionales que recojamos.

¡Acompáñanos en este viaje!

Valentina Elias
Cofundadora